martes, 23 de diciembre de 2008

Carta abierta de la Comunidad del Acosta por sumariar a la rectora


C.A.B.A., 19 de diciembre de 2008


Sr. Ministro de Educación del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires,

Lic. Mariano Narodowski

Una vez más la Comunidad del Colegio Mariano Acosta se ve en la obligación de dirigirse a Ud. por los hechos acaecidos que ya son de dominio público.

En primera instancia estamos en desacuerdo con la decisión de su cartera de sumariar a la rectora de la institución y por ello exponemos los siguientes fundamentos.

La Rectora Raquel Papalardo asumió sus funciones en un momento de vacío institucional, generado tras un largo y penoso proceso iniciado el año pasado como consecuencia de la larga serie de irregularidades detectadas durante el desarrollo de las obras de refección del edificio del colegio por parte de la adjudicataria Bricons S.A., irregularidades que alcanzaron su punto culminante con el derrumbe de un cielorraso del tipo "suspendido", hacía poco colocado por dicha empresa en una de las aulas, derrumbe que milagrosamente no provocó víctimas por haberse producido en día domingo. La empresa intentó escudarse en ridículas excusas que se rápidamente se desvanecieron en el aire cuando varios peritajes demostraron más allá de toda duda razonable que no sólo ése, sino todos los cielorrasos suspendidos colocados hasta el momento presentaban graves vicios de ejecución estando expuestos al derrumbe en cualquier momento, razón por la cual se debió proceder a reforzarlos en su totalidad. Pese a ello, en ese momento no se adoptó medida alguna contra la contratista por parte del área responsable del GCBA y fue mérito exclusivo de la lucha llevada adelante por la comunidad de padres y madres del Acosta el que finalmente Bricons S.A. fuera separada de la obra. El rector a la sazón en funciones, en momentos tan críticos como los que la comunidad del Acosta tuvo que atravesar, brilló por su ausencia.

Por ello, ahora sorprende que se censure la actitud de la Rectora Papalardo con argumento basados en una presunta vulneración de la seguridad en el ámbito del Colegio, luego de este historial de total desprecio por la seguridad de quienes, directivos, docentes y alumnos, durante el período consignado hubieron de desarrollar su actividad en el contexto descripto. Llama poderosamente la atención el diferente rasero aplicado a quienes con un criterio abiertamente capcioso son acusados de atentar contra la seguridad y el aplicado respecto de aquellos (como la citada Bricons S.A., contra la que no se sabe que se hayan tomado medidas punitorias o el Arq. Lagrecca, a la sazón director de Infraestructura de Educación del GCBA que, lejos de ser sumariado por sus enormes responsabilidades por acción u omisión, fue premiado) atentaron gravemente contra la seguridad de los integrantes de la comunidad del Acosta como quedó acreditado con creces.

En esta Comunidad Educativa del Acosta hay consenso unánime entre padres, madres y alumnos de que por primera vez en años tenemos al frente del establecimiento un directivo que se ha entregado de cuerpo y alma a su elevada misión y mantiene con todos sus integrantes un vínculo no sólo impecable desde lo profesional sino entrañable desde lo humano.

Pero parecería que ello, especialmente el último aspecto, es algo incompatible con la idea que Ud. posee acerca de cuál debe ser el perfil más idóneo de la persona que deba ejercer la función que ejerce la rectora Papalardo. Y que pese a la limpieza del proceso a través del cual la rectora Papalardo accedió al cargo que hoy ocupa en el Acosta, desde su ministerio no han ahorrado medios para intentar desplazarla o al menos, obstaculizar su gestión.

En efecto, desde esta comunidad educativa no hemos podido dejar de apreciar que durante el año en curso su gestión ministerial ha tratado de diferentes formas de lesionar la autoridad y el vínculo de la comunidad del Acosta con la rectoría y la opinión pública.

Entre los intentos objetivos de su accionar ministerial podemos nombrar que a la Rectora Raquel Papalardo:

Se le hizo un sumario bajo los siguientes cargos:

Que se negaba a ceder las aulas de media que le solicitaban para el proyecto de capacitación del Gobierno – PROMSE - aunque nunca le bajaron un anuncio oficial de que ese espacio ya estaba designado para ese fin.

Que fue ella quien le pide a la ex Vicedirectora del T.M. Prof. Winterlich la separación del cargo, cuando sabemos que fue Ud. en persona quien tomó esa decisión, en el confuso episodio del vigilante-policía que se metió en un aula.

Que el Consejo de Convivencia, del cual forma parte como rectora, fue quien decidió la toma de la escuela junto a los estudiantes, faltando claramente a la verdad e ignorando la responsabilidad de su ministerio en la arbitrariedad de quitar las becas estudiantiles a más de la mitad de los alumnos de la ciudad.

Que su cartera ministerial asciende a quien fuera rector del Mariano Acosta -aquél que, como queda dicho, brillara por su ausencia cuando más se lo necesitó en su puesto- a pesar que el mismo tiene un sumario que fue iniciado por la ex Ministra Ana María Clement.

Sería deseable que su ministerio dejara de malgastar recursos y energías en obstaculizar el accionar de los funcionarios sinceramente comprometidos con la educación pública y que se ocupara en forma más eficiente de proveer a las cuestiones que en lo que lleva de gestión dejan mucho que desear: vgr., que no falten útiles en las escuelas, que haya gas e inversión en infraestructura y equipamiento escolar, que se restituyan las jornadas de reflexión docente, que se deje de perseguir a docentes y estudiantes ya que esas prácticas remiten a épocas oscuras de la Argentina que creíamos haber dejado definitivamente atrás.

Por último pero no por ello menos importante: esgrimir que en un festejo se pierde la asimetría es faltar el respeto al Estatuto del Docente Municipal y al Reglamento Escolar, esperamos que Ud. pueda tener lecturas ampliadas de la situación y se terminen los avances represivos sobre la comunidad del Acosta, sean: estudiantes, madres y padres o docentes y directivos.

Comunidad Educativa del Normal Nº 2 Mariano Acosta